miércoles

Apuestas.

Cada vez que ella lo miraba, allí recostado en la arena con todas las cartas en la mano, le entraban unas ganas incontrolables de gritarle.¡No lo soportaba! Odiaba perder.

-No te imaginas las ganas que tengo de sacarte esa sonrisa! No te sorprendas cuando te gane.

La desagradable mueca siguió en aumento.

-Segura? que yo sepa solamente hay dos formas de hacerlo- de a poco aquellos ojos verdes empezaban a agrandarse-la primera es diciéndome que mi equipo favorito de fútbol perdió, y la segunda…- y su mirada provocativa terminaba por delatarlo- es con un beso, aunque después de todo siga sonriendo.

3 comentarios: